
ante el acoso de sus compañeros y las críticas constantes por manifestar su opinión, decidió irse. dice que no va a volver, aunque todo está por ver. la incertidumbre del sometimiento al olvido y ser ignorado tal vez podrá ser demasiado intenso para un alma en pena en vida, un perdedor nato... un delincuente de la soberbia. el terrorista del entusiasmo ha propuesto su marcha por la puerta grande... ¿qué piensan todos los demás? se está escapando el último conejo que había en la chistera de este mago, que es la vida, cuya función ha estado defraudando una vez detrás de otra a nuestro insignificante protagonista. ni si quiera él sabe si está convencido de nada de lo que hace. ya no tiene ánimo. nunca lo ha tenido. él cree que así se cura de todo mal. encerrarse en una cueva. allí no hay problemas. sin complicaciones, sin intromisiones. sin el olor a despedida que ha percibido en sociedad............................................................. .......................................... ...................... ..... . . . . . . . . . . . . adios.